Durante el proceso de transición, agentes del alguacil del condado estarán presentes para supervisar el tráfico y garantizar que los conductores se adapten de manera segura a la nueva señalización.

A pesar de las condiciones adversas, las autoridades han informado que las calles siguen siendo transitables.

Se espera que la construcción concluya en diciembre y se espera que el tráfico esté abierto a principios de noviembre.

Los negocios dentro del área de cierre seguirán teniendo acceso directo a sus instalaciones.